Este es el caso de mi amigo Israel Cabeza, cuando de chico, el jugaba a ser costalero le decía a su padre que quería ser costalero como él, y lo fue, es más, Cabeza a trabajado hombro con hombro con su padre... Ahora, es su hijo, el que se coloca el costal de su padre y también le dice que algún día trabajará a su lado.
Que bonito Cabeza! tres generaciones de costaleros de San Julián.
Un abrazo tocayo! gracias por las fotos y a seguir criando a uno de los que nos tienen que dar el relevo a nosotros.
1 comentario:
Cabeza, dale recuerdos a tu padre! espero veros algún miercoles de estos en el Iván...
Un abrazo!
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